Nueva York, 20 oct (EFEUSA).- Nueva York dio hoy un paso importante para combatir el uso de la marihuana sintética, que ha ido en aumento en la ciudad, al convertir en ley varios proyectos que castigan la manufactura, posesión con intención de vender y la venta de la "K2" o "Spice", como también se le conoce.
El alcalde Bill de Blasio señaló que con esta nueva legislación la ciudad está sacando la droga de las calles y de las manos de los neoyorquinos.
«La K2 es un veneno que amenaza la seguridad y salud pública. Esta nueva legislación penaliza la manufactura y venta sin castigar a los usuarios, que han sido secuestrados por esta droga», que se vende en bodegas, afirmó De Blasio.
El alcalde, que firmó los proyectos en un acto junto al jefe de la policía, Bill Bratton, y la presidenta del Concejo, Melissa Mark Viverito, autora de la legislación, destacó que se han presentado cargos contra diez vendedores de esta droga sintética y confiscado productos, ingredientes y parafernalia valorados en 17,5 millones de dólares.
Esta legislación es parte de los esfuerzos de la ciudad para combatir la marihuana sintética, que se conoce por al menos 80 nombres, entre ellos, «gigante verde» y «precaución», que ha causado muertes a través del país, y que se ha hecho popular entre la población de los sin techo en esta ciudad.
De acuerdo con la nueva legislación, la manufactura, posesión con intención de vender y su venta será considerado un delito menor castigable con hasta un año en prisión y hasta 5.000 dólares en multa.
Igualmente, autoriza a la ciudad a revocar, suspender o negar la renovación de la licencia para vender cigarrillos, si el negocio está vendiendo marihuana sintética o imitación de drogas sintéticas.
La posesión, venta, o manufactura de la droga está prohibida por orden del Departamento de Salud municipal con multas de 250 dólares por paquete, pero su prohibición no estaba contenida en el código penal, lo que buscaba hacer el proyecto de Mark Viverito y otro presentado en el Senado estatal, que lo estará evaluando el próximo año.
Todos los 50 estados de este país han emitido prohibiciones desde 2011 a sustancias químicas encontradas en el producto, y en 2012 una ley federal añadió otras a esa lista, pero sus fabricantes han alterado la composición química para evadir la prohibición.
Nueva York ha visto un aumento en los pacientes que van a los hospitales bajo los efectos de esta sustancia y aunque en un 90 % son adultos, hay jóvenes entre los 12 y 22 años en rehabilitación por el uso del químico.
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