Expertos dudan de que las FARC estén adiestrando a carteles mexicanos

Expertos dudan de que las FARC estén adiestrando a carteles mexicanos

México, 18 may (EFE).- Las versiones de que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) están adiestrando militarmente a algunos cárteles mexicanos de la droga fueron puestas hoy en duda por expertos consultados por Efe, que creen que la relación está acotada al tráfico de armas o estupefacientes.

La revista mexicana Proceso publicó este domingo una información obtenida de fuentes de inteligencia de EE.UU., según la cual las FARC entrenaron en la selva colombiana a sicarios de los cárteles de Jalisco Nuevo Generación (CJNG) y de Los Cuinis en el manejo de armamento de alto calibre para contrarrestar ataques militares.

Las fuentes del semanario dijeron desconocer el número exacto de miembros formados en Colombia, pero estimaron que rondaría los 50.

El entrenamiento habría permitido el 1 de mayo el derribo con un lanzagranadas de un helicóptero militar en el estado occidental de Jalisco por parte del CJNG, que causó la muerte de nueve personas.

Consultado por Efe, el especialista en seguridad nacional y académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Javier Oliva opinó que las FARC y los carteles pueden conocerse del «mercado ilegal de las armas, por contactos o por fines comerciales, pero en el tema del adiestramiento es un tanto difícil».

«Me parece poco viable que se haya dado este adiestramiento, sería más viable explorar la relación comercial que pudieran tener, por ejemplo, en el tráfico de cocaína», dijo, por su parte, el también profesor de la UNAM y estudioso de temas de defensa Ricardo Ravelo.

El vínculo en el narcotráfico quedó probado en diciembre pasado con la detención en Panamá de una banda de traficantes relacionada con las FARC y el cártel mexicano de Sinaloa.

«No basta que lo sostenga la Agencia Antidrogas estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés)», señaló Oliva, quien consideró que estas afirmaciones podrían afectar el proceso de paz iniciado a fines de 2012 por las FARC y el Gobierno colombiano, que tiene lugar en Cuba.

Antes de la publicación en Proceso, el rotativo The Wall Street Journal, citando fuentes oficiales, informó de que el CJNG recibió adiestramiento de exmiembros de los kaibiles (soldados de élite) de Guatemala, de varios veteranos militares mexicanos y de uno estadounidense.

Si bien explicó que las FARC disponen de armas de alto calibre y llevan más de 50 años luchando contra el Estado colombiano, Oliva no cree que esté formando a los carteles mexicanos.

Según comentaron ambos especialistas, se especula desde hace años sobre el posible vínculo entre cárteles mexicanos y grupos terroristas, pero jamás se ha demostrado.

«Los dos viven en el mundo de la ilegalidad, el terrorista y el delincuente. Y por ello pueden tener algún tipo de contacto, pero de ahí al adiestramiento es muy diferente», zanjó Oliva.

Los dos expertos hicieron una radiografía de la situación actual de los cárteles, que viven un momento de «fragmentación» tras la detención de importantes capos este año como Omar Treviño, del Cártel de Los Zetas, y Servando Gómez «La Tuta», de los Caballeros Templarios.

A ellos se suma el líder del cártel de Sinaloa, Joaquín «El Chapo» Guzmán, arrestado en febrero de 2014

«Estas estructuras originales se están debilitando y hacen surgir otras más locales», apuntó Ravelo.

«No manejan rutas, sino zonas», dijo Oliva, quien señaló que el abatimiento de los criminales «no inhibe la violencia ni disminuye el mercado de drogas».

Cuestionado sobre la fuerza del CJNG, Ravelo opinó que son otros cárteles, los tradicionales, los que a pesar de su aparente debilitamiento todavía tienen mayor poder.

Oliva apuntó que, más allá de las detenciones, se deberían controlar los flujos de dinero ilícito y, sobre todo, cortar el acceso a armamento.

«Se nota poco el compromiso estadounidense para frenar el paso de las armas ilegales a nuestro país. Pero la disposición de armas de fuego, sobre todo de asalto poderoso, da (al crimen organizado) capacidad para agredir o repeler las fuerzas de seguridad en un desafío tú a tú», apuntó.

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