Washington, 21 ene (EFEUSA).- Estados Unidos recordó hoy la "urgencia" de llegar a un alto el fuego e iniciar una transición política en Siria, después de que la ONU indicara que las negociaciones de paz sobre el conflicto sirio se pospondrán probablemente unos días.
«No creemos que vaya a haber un retraso significativo, si es que lo hay (…). Nuestra expectativa es que si esto se aplaza un par de días, ciertamente eso es aceptable. Pero queremos que las conversaciones sigan», dijo Mark Toner, portavoz del Departamento de Estado de EEUU, en su conferencia de prensa diaria.
El 25 de enero debían entablarse negociaciones directas entre el régimen sirio y una delegación elegida de entre los diferentes grupos de la oposición, pero la ONU afirmó hoy que es probable que se retrasen unos días debido a razones prácticas.
Toner dijo que también hay quienes quieren retrasar las negociaciones para insertar condiciones previas de acceso a la ayuda humanitaria y que la entrega de esa asistencia debe ser «una prioridad».
«Pero hay una urgencia de poner en marcha un proceso político y un alto el fuego, que darán fe al pueblo sirio e impulsarán una solución a largo plazo» para una guerra que dura ya casi cinco años, añadió el portavoz.
Además, Toner explicó que es posible que las negociaciones no se lleven a cabo en un cara a cara directo entre el régimen sirio y la oposición, sino mediante un sistema de «proximidad» que probablemente implicaría a una «tercera parte neutral» que ejercería de mediador, dada la tensión entre las partes.
El principal problema para poner en marcha las negociaciones recae sobre qué grupo opositor se considera terrorista y cuál no; dado que el régimen sirio y el gobierno ruso aplican esa etiqueta a unas facciones que la delegación opositora recién conformada acepta como interlocutores válidos.
La ONU ha dejado claro que debe aclararse el punto de quién es y quién no un representante válido para ambas partes, antes de comenzar el proceso.
Compuesta por 17 personas, la delegación opositora está presidida por Asad al Zubi, un general desertor, y como negociador jefe ha sido designado Mohamed Alush, responsable del Ejército del Islam, que controla amplios territorios en la periferia de Damasco, y que es considerado por Moscú y Damasco como un grupo terrorista.
Pero poco más de 24 horas después de su composición, uno de los grupos que la integran, el Consejo de Coordinación Nacional (CCN), rechazó a la delegación negociadora de los opositores por considerar que no es apta para dialogar con las autoridades.
Además, la oposición condiciona su participación al cumplimiento de varias exigencias, entre ellas que antes del comienzo del diálogo con el régimen deben cesar los bombardeos ruso-sirios contra civiles y los asedios a las poblaciones, y se ha de garantizar que su grupo negociador sea el único representante de la oposición.
El proceso negociador fue trazado por el Consejo de Seguridad de la ONU el pasado 18 de diciembre en una resolución adoptada por unanimidad que pidió el inicio de negociaciones directas y fijó un plazo de seis meses para que las dos partes establezcan un Gobierno de transición y de 18 meses para la celebración de elecciones.
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