Nueva York, 21 ene (EFEUSA).- La ciudad de Nueva York presentó hoy un presupuesto preliminar de 82.100 millones de dólares para el año fiscal 2017, que comienza en julio próximo, con unas cuentas con más gasto pero que no incluyen grandes novedades.
El plan, desvelado por el alcalde Bill de Blasio, tiene en cuenta las actuales incertidumbres económicas y, por ello, incluye un aumento de la partida destinada a reservas para hacer frente a imprevistos.
Tras dos ejercicios marcados por ambiciosos proyectos como la ampliación de la educación preescolar pública y el aumento del número de viviendas asequibles, estas cuentas evitan nuevas iniciativas de este tipo y se centran en la implementación de esas políticas y en acciones a menor escala.
El presupuesto crece con respecto a los 78.500 millones aprobados el año pasado y lo hace en parte para pagar medidas anunciadas en los últimos meses como el aumento del salario mínimo de los empleados municipales a 15 dólares la hora y los nuevos programas para apoyar a los sin techo.
Las cuentas incluyen también financiación para el tratamiento de personas con problemas mentales que pueden suponer un riesgo para la seguridad pública y la expansión de una iniciativa dirigida a combatir el uso de armas.
Además, hay partidas para importantes proyectos muy concretos como la puesta en servicio de un nuevo ferry a Staten Island y para la ampliación del número de plazas en las escuelas de la ciudad.
La administración del demócrata De Blasio apuesta por un presupuesto «responsable» y que mejore la situación fiscal a largo plazo de la ciudad, según dijo hoy.
Así incluye, por ejemplo, una contribución de 1.000 millones de dólares a las reservas municipales y otra de 3.400 millones para pensiones.
«A pesar de otro año de crecimiento económico sólido, los riesgos y las incertidumbres siguen creciendo», avisó el gobierno local en un comunicado.
Entre los problemas de cara al futuro el equipo de De Blasio destacó el aumento de las desigualdades pese al fuerte crecimiento del empleo en la ciudad y la situación en los mercados financieros desde principios de año.
En ese sentido, recuerda que la última recesión pilló por sorpresa a los principales economistas del país y generó «pérdidas dramáticas» a nivel federal y local.
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