Precandidato O’Malley apuesta por Latinoamérica y repasa ideas presidenciales

Precandidato O’Malley apuesta por Latinoamérica y repasa ideas presidenciales

Washington, 9 nov (EFEUSA).- El aspirante a la nominación demócrata a la Presidencia Martin O'Malley apostó en una entrevista telefónica con Efe por una política exterior centrada en Latinoamérica y repasó algunas de sus propuestas, como la regularización de la mayor parte de los indocumentados.

O’Malley, tercero en las encuestas tras Hillary Clinton y Bernie Sanders, abogó por ampliar las sanciones a Venezuela y se mostró escéptico con la nueva estrategia en Siria del presidente Barack Obama, que decidió enviar un reducido número de tropas para asesorar a la oposición moderada en la lucha contra el Estado Islámico (EI).

Este es el texto de la entrevista:

Pregunta.- EEUU ha cambiado su relación con Latinoamérica en los últimos años y especialmente con Cuba. Obama está actualmente revisando opciones para relajar el embargo con Cuba, según dijo esta semana el Departamento de Estado. Si llega a ser presidente, ¿qué acciones tomaría para acabar con el embargo?

Martin O’Malley.- Creo que deberíamos avanzar en la normalización en las relaciones con Cuba. Creo que una futura política exterior estadounidense más comprometida y más colaborativa empieza por reparar, mejorar y fortalecer las relaciones en nuestro propio hemisferio y nuestras extrañas relaciones con Cuba en los últimos 50 años han sido una fuente de tremenda controversia. Y creo que la normalización de las relaciones, el fin del embargo, es un paso muy positivo hacia adelante y lo apoyo.

Creo que debemos de revitalizar nuestras relaciones en las Américas. Tendemos como nación, quizás por nuestra orientación europea, a mirar al Este y al Oeste y quizás no lo suficiente al Norte y al Sur. Así que mi política exterior sería una política exterior basada en mejores relaciones con las Américas y un mejor esfuerzo en las relaciones de ciudad a ciudad en las Américas. Mejores relaciones en términos del futuro energético limpio que debemos de crear en este planeta y creo que, en todos esos sentidos, podemos ser más efectivos fuera y también más fuertes aquí en casa.

P.- Pero hay países, voy a preguntarle sobre Venezuela, que han tenido una relación problemática con EEUU en los últimos años. Como presidente, ¿cuál sería su política de cara al Gobierno de Nicolás Maduro? ¿Extendería las acciones que actualmente han sido impuestas por la Administración Obama o buscaría otro camino?

Martin O’Malley.- Creo que Venezuela tiene decisiones que tomar. Puede interactuar como una nación responsable de este hemisferio con respeto a los derechos humanos o puede continuar tomando decisiones abusivas como encerrar alcaldes. Creo que me planté y envié una carta en nombre de estos alcaldes que estaban siendo puestos como objetivo en Venezuela. Creo que Venezuela tiene una decisión que tomar y creo que las sanciones que el presidente ha puesto en marcha son las sanciones correctas y deben de continuar hasta que Venezuela deje de detener a opositores políticos.

P.- ¿Continuaría entonces imponiendo más sanciones?

Martin O’Malley.- Sí, lo haría.

P.- Querría preguntarle también por la campaña. Actualmente las encuestas le dan un 1,8 % de popularidad en todo el país…

Martin O’Malley.- De hecho hemos llegado a 3 en popularidad, nos hemos movido arriba en cada encuesta desde que finalmente se nos permitió comenzar a tener debates hace dos semanas. Así que, bajo mi punto de vista, esta carrera cambió completamente hace dos semanas cuando comenzamos a tener debates. El debate fue visto por más gente que ningún otro debate de las primarias del Partido Demócrata y los estadounidenses vieron a cinco candidatos sobre el escenario. La última vez, el vicepresidente (Joe Biden) estaba pensando en entrar en campaña, pero en dos semanas dos de los candidatos han caído, el vicepresidente ha decidido que no iba a competir y ahora somos tres.

(…) Ahora con tres candidatos en el escenario, soy el único que representa a una nueva generación de liderazgo y nuestro partido siempre se inclina hacia el futuro. También soy el único candidato con 15 años de experiencia ejecutiva que ha logrado sacar adelante políticas progresistas y no solo hablar de ellas.

¿De qué estoy hablando yo? Estoy hablando de conseguir un salario digno, subir el salario mínimo, hacer mis escuelas las mejores del país durante cinco años seguidos, conseguir que no subieran las tasas universitarias en cuatro años, aprobar el «Dream Act», igualdad en el matrimonio, licencias para conducir para los nuevos inmigrantes estadounidenses, una legislación completa de control de armas, derogar al pena de muerte. Todas esas cosas las hice, así como conseguir que nuestras tasas de encarcelamiento bajaran al nivel más bajo en 20 años y conseguir rebajar las tasas de crimen al nivel más bajo en 30 años.

Mi experiencia es la fuente que me diferencia de una secretaria de Estado y un senador. Yo he tenido que sacar adelante políticas, he tenido que lograr un equilibrio del presupuesto cada año y he salvado vidas reduciendo el crimen y la adicción a las drogas.

P.- Llevó a cabo muchas políticas migratorias en su estado. Si llega a la Casa Blanca, ¿emitiría más acciones ejecutivas? ¿Para aliviar la situación de cuántas personas?

Martin O’Malley.- Seguro que lo haría. Extendería las acciones ejecutivas, al menos, a todas las personas que contemplaba el más reciente proyecto legislativo del Senado y también acabaría con la vergonzosa practica de detener, indefinidamente, a mujeres y niños en estos centros de detención orientados al beneficio y ubicados en nuestras fronteras.

Creo que cuando rompemos familias sin ninguna buena razón de seguridad pública, en realidad estamos haciendo daño a nuestro país. Cuando despedazamos familias, cuando imponemos la prohibición sin sentido de entrar a inmigrantes en el país por tres o diez años, eso hace daño a nuestro país.

Por eso, tengo la intención no solo de trabajar hasta que aprobemos una reforma integral de inmigración, sino que también tengo la intención de ir más lejos de lo que ha ido el presidente Obama en el uso de su autoridad ejecutiva. Creo que, para ese momento, de hecho las cortes habrán respaldado el derecho de hacer eso.

Creo que estas deportaciones sin sentido, están dañando a nuestro país. Creo que lo que ayudaría a nuestra economía a crecer, lo que ayudaría a los salarios a crecer, son otras muchas opciones. Una de ellas es sacar a 11 millones de nuestros vecinos fuera de la economía de las sombras y ayudarles a entrar de lleno en la economía estadounidense.

Eso haría crecer lo salarios, de media 250 dólares por hogar en Estados Unidos, ayudaría a la seguridad social, ayudaría a reducir nuestro déficit y ayudaría a nuestra economía a crecer porque todos sabemos que los nuevos inmigrantes estadounidenses son más propensos a empezar negocios y crear empleo.

P.- Acaba de hablar de los centros de detención. Mucha de la gente que vive en esos centros procede de El Salvador, Honduras y Guatemala. Obama ha presionado al Congreso para conseguir fondos para el Plan Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte. Si fuera elegido presidente, ¿continuaría con esta política? ¿Qué cambiaría?

Martin O’Malley.- Cuando los niños centroamericanos llegaron a nuestra frontera el año pasado, hablé con la Casa Blanca y dije que no deberíamos de estar deteniendo a estos niños en campos de detención o, con el término que ellos usan, «centros de residencia grupal». Dije que deberíamos poner a esos niños en casas de acogida. Reuní a líderes de mi estado y acomodamos a más niños de Guatemala, Honduras y El Salvador per cápita que cualquier otro estado.

He viajado a El Salvador, me senté durante una hora y media a escuchar las historias de alrededor de 20 alcaldes de todo El Salvador. Hablaron del hecho de que la mayoría de sus negocios pagan más en extorsión a los traficantes de drogas y bandas de la muerte de lo que pagan en impuestos a su propio país.

Tenemos que hacernos oír y hacer un mejor trabajo en reducir la amenaza que acosa a países en nuestro propio hemisferio y que los convierte en fallidos narcoestados. Mientras tanto, cuando nos enfrentamos a crisis humanitarias como esta, debemos de actuar como estadounidenses. Debemos recordar que nuestro símbolo como país no son los barrotes de las verjas, sino la Estatua de la Libertad.

(…) Creo que nuestra política exterior debe ser más comprometida y colaborativa con naciones que están retrocediendo y luchando contra estas bandas de las drogas y de la muerte, muchas de las cuales extienden sus redes aquí en Estados Unidos.

P.- Permítame hacerle una última pregunta. Esta vez sobre Siria. Como presidente, ¿desplegaría tropas estadounidenses sobre el terreno para combatir al Estado Islámico?

Martin O’Malley.- Creo que el próximo paso en Siria es lograr una amplia solución política, que traiga algo de estabilidad política a corto plazo que permita a todas las naciones implicadas en el conflicto, incluida recientemente y de una gran forma Rusia, concentrar sus actividades en contener al Estado Islámico (EI), deteriorar al Estado Islámico y cortar sus ingresos y propaganda para finalmente vencerlo.

Creo que una de las lecciones que debemos de tener presente es que en los últimos 15 años, desplegar a soldados estadounidenses sobre el terreno en Oriente Medio a veces ha tenido el efecto contrario del que a nosotros nos gustaría. Podría convertirse en una gran herramienta de reclutamiento, como ocurre con la continuación de la Base Naval de Guantánamo, que sirve para que (los terroristas) aumenten su reclutamiento. Si el Estado Islámico y Al Qaeda son capaces de reclutar a más gente de las bajas que sufren, entonces no estamos teniendo éxito en nuestra misión.

Creo que los mejores soldados que deberían de estar en el frente son aquellos de los países que tienen más que perder por la expansión del Estado Islámico en parte de Siria e Irak. El presidente ahora ha desplegado sobre el terreno a 50 consejeros especiales. Nos han dicho que no son tropas de combate, sino consejeros y esperemos que este sea el comienzo para negociar un acuerdo político que incluya a los rusos y otras naciones con intereses crecientes en esta región, para que todos podamos poner nuestra atención internacional en acabar con el Estado Islámico.

Deja un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos estan marcados con *

Cancel reply