Aumentan los puertorriqueños que juegan a la lotería en medio de la crisis

El director auxiliar de la Lotería Electrónica de Puerto Rico, Armando Pérez, dijo hoy a Efe que el Powerball, que llegó a la isla en octubre de 2014, gana día a día adeptos y que la crisis, con la consecuente reducción de dinero para gastos no indispensables, no ha provocado una merma en el número de participantes.

«El juego es independiente del ciclo de la crisis», indicó Pérez, para quien al contrario muchos puertorriqueños, ante los millonarios botes, se ven atraídos cada vez más por probar suerte en el Powerball, una vía, aunque remota, de salir de los agobios económicos que impone una crisis instalada en la isla caribeña desde hace casi una década años.

«El número de apostantes se sitúa por encima de lo que esperábamos», indicó Pérez, tras señalar que el pasado sábado se alcanzó en Puerto Rico un récord de recaudación para el sorteo de ese día del Powerball, de 5,8 millones de dólares.

Dijo que esa cifra récord de recaudación fue posible gracias a 84.000 jugadas realizadas para ese sorteo.

«Nos informaron de filas de personas en muchos establecimientos para realizar sus jugadas e, incluso, de situaciones en las que tuvieron que reforzarse los turnos de trabajo para atender a todos los que querían realizar sus apuestas», indicó el directivo.

La «fiebre» de los puertorriqueños por el Powerball corre en paralelo a la que existe en Estados Unidos continental, donde el bote alcanza para el sorteo del próximo miércoles los 1.400 millones de dólares, la mayor cantidad de la historia, después de que el sorteo del sábado por la noche quedara sin ganador.

El Powerball se juega en 44 estados del país norteamericano, en el Distrito de Columbia (donde está Washington), en Puerto Rico y en las Islas Vírgenes estadounidenses.

Pérez adelantó que en Puerto Rico se espera recaudar unos seis millones de dólares para el sorteo del miércoles, lo que supondrá un nuevo récord en el territorio caribeño.

«Cómo no va a aumentar el número de seguidores con el ‘gordo’ en juego», indicó el directivo en referencia a lo atractivo que tiene la posibilidad de ganar millones de dólares que cambien la vida de una persona.

Los millonarios botes coinciden con uno de los peores momentos de la profunda crisis económica que afecta a la isla, lo que en su opinión aumenta los sueños de los puertorriqueños que ven en el «gordo» del Powerball una forma de abandonar las estrecheces.

En cuanto a la dificultad que supone ganar el millonario «gordo», indicó que la mejor muestra de que no es imposible dar con el premio es que desde 2014 ya ha recaído en dos ocasiones en la isla caribeña.

El pasado sábado el «gordo» quedó vacante y en Puerto Rico el máximo ganador fue una persona que se llevó 150.000 dólares, una cifra nada despreciable en estos momentos de crisis en los que cada dólar cuenta, dijo.

Recordó para quienes sueñen en llevarse el «gordo» el próximo miércoles que los 1.400 millones de dólares se quedarán para quienes quieran cobrarlos en un solo pago en 806 millones de dólares, o lo que es lo mismo 22.000 dólares diarios durante los próximos 100 años.

Quienes apuesten deben escoger cinco números, del 1 al 59, que representan las bolas blancas del sorteo y también seleccionar un número del 1 al 35 que representa la bola roja o el llamado Powerball

El Powerball, que pertenece a la Asociación de Lotería Multiestatal de Estados Unidos (MUSL), tan sólo lleva jugándose en Puerto Rico poco más de un año (desde octubre de 2014) y forma parte de la estrategia del Ejecutivo puertorriqueño para elevar los fondos que entran a las cuentas públicas de la isla caribeña.

Las proyecciones de la Lotería Electrónica prevén que con este juego se recauden al menos 60 millones anuales en Puerto Rico, de los que el 50 % se destinarán al pago de premios.