Gente de Zona cierra el 2015 como uno de los exponentes del reguetón cubano

Alexander Delgado y Randy Malcolm explicaron durante una entrevista con Efe en Miami, Florida, que cuando se instalaron en Estados Unidos hace poco más de dos años se mostraron reacios a la posibilidad de hacerse un hueco en la industria musical latina del país.

«No esperaba tanto (éxito) porque veníamos de Cuba, teníamos un sueño y, a veces, eso se hace lejano», relató Delgado.

Pese a todo «a veces se rompe el mito» y el sueño se hace realidad, confesaron los intérpretes de «La Gozadera», quienes dijeron estar «felices con esto que está pasando» ya que han podido llevar su música a muchos rincones del planeta y eso ha permitido abrir la puerta a «todos los cubanos».

«Esto es un paso, es una puerta abierta para todos los cubanos, que se lo merecen», agregaron.

Desde que «Bailando», canción interpretada junto a Enrique Iglesias, Sean Paul y Descemer Bueno, se convirtiera en una sensación en todo el mundo, Gente de Zona se ha posicionado como uno de los grupos de referencia en el género del reguetón y el merengue cubano.

Hasta el momento los interpretes cuentan con tres premios Grammy Latino, otros dos de los Latin American Music Awards y un Latin Billboard. «Esto no ha hecho más que empezar», confesaron los artistas que llevan más de quince años en la música.

«Queremos dar las gracias a Dios por permitirnos estar donde estamos y transmitir nuestra música al mundo entero», afirmaron los cubanos que también agradecieron el apoyo de su «familia y de todos los fans, especialmente, los cubanos» que los han estado siguiendo durante muchos años.

Los integrantes de Gente de Zona confesaron que lo que más ilusión les ha hecho «ha sido cantar con tantos artistas», como Enrique Iglesias, Pitbull o Marc Anthony, entre otros.

Los cantantes lanzaron su último tema «Traidora», una canción que vuelven a interpretar junto al salsero de origen puertorriqueño, Marc Anthony.

Según Randy Malcolm, uno de los integrantes del dúo cubano, esta propuesta musical pretende «convertirse de nuevo en un éxito», tal y como fue «La Gozadera».

«Siempre digo que cuando hay una gran canción todo va a salir bien. Y en tan sólo siete días tuvo más de un millón de visitas, por eso creo que viene muy fuerte», dijo el cantante convencido de «que a partir de enero el tema tendrá el éxito que se merece».

«Traidora» servirá de antesala para el lanzamiento de su disco de estudio que incluirá doce canciones inéditas, seis de las cuales serán colaboraciones.

De su parte, Alexander Delgado explicó que «Traidora» nació con la intención de «narrar una historia de amor basada en hechos reales» y se mostró convencido de que sus seguidores se verán «reflejados» en la letra de esta melodía.

«Va a llegar a todos los corazones, y tanto los hombres como las mujeres van a verse reflejados», afirmaron los artistas minutos antes de empezar una actuación en Miami Beach, Florida.

Con este nuevo trabajo, el dúo quiere que su público «empiece a conocer a Gente de Zona en solitario» más allá de las colaboraciones que han realizado junto a conocidos artistas.

Malcolm explicó que el grupo «está abierto» a cualquier tipo de colaboración, incluso se atreverían a trabajar con «cualquier artista» especialmente en música «regional mexicana», por lo que esperan tener propuestas de ese tipo muy pronto.

«Si hay que hacerlo lo hacemos porque nosotros somos artistas capaces de incorporarnos a cualquier género, y creo que también podríamos bailarlo también», añadió Delgado.

Pese a su gran éxito, más allá de las fronteras latinoamericanas, los integrantes de Gente de Zona, por el momento, no se atreven a interpretar un tema en inglés, una asignatura pendiente en sus carreras.

«A nosotros, a veces no se nos entiende en español. ¿Cómo vamos a hacerlo en inglés?», bromearon los artistas que aseguraron que deben prepararse con el idioma para poder cantar un tema «en condiciones».

«Lo que vamos a hacer es cantar con otro artista que lo haga en inglés», aseguró Delgado al tiempo que su compañero Malcolm asentía con un «yes» (sí) entre carcajadas.