Naciones Unidas, 24 nov (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, expresó hoy su "profunda preocupación" por las recientes restricciones impuestas por varios países de los Balcanes a la entrada de refugiados que no sean sirios, iraquíes o afganos.
«Distinguir a los demandantes de asilo en base a su supuesta nacionalidad vulnera el derecho humano de toda persona a buscar asilo, sin importar su nacionalidad», dijo Ban a través de un comunicado de su portavoz.
En las fronteras entre Grecia y Macedonia, y entre este último país y Serbia, sólo se permite el paso de nacionales de Siria, Irak y Afganistán, mientras que al resto se les impide cruzar, con al menos un millar de personas retenidas del lado griego.
La filtración de refugiados de acuerdo a la nacionalidad empezó la semana pasada y las críticas de la ONU a tal medida no han sido atendidas y las autoridades de Macedonia y Serbia lo siguen haciendo, según alertó hoy la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
«El secretario general llama a todos los países de la región a responder de forma efectiva al creciente problema humanitario y a asegurar que sus políticas de control de demandantes de asilo están en línea con las leyes internacionales de refugiados y de derechos humanos», señaló la ONU.
Ban pidió a los Gobiernos europeos mejorar sus capacidades para la recepción de personas y acelerar los programas de reubicación de refugiados.
Además, recordó que las «expulsiones y devoluciones colectivas están estrictamente prohibidas bajo la ley internacional».
El jefe de Naciones Unidas reiteró sus llamamientos a los países de la región a responder con «compasión, solidaridad y responsabilidades compartidas» a la llegada de personas a sus fronteras y consideró que la actual situación deja clara la necesidad de coordinar la gestión.
Las restricciones en las fronteras de los Balcanes han provocado hasta el momento protestas en las que han participado unas 200 personas, principalmente iraníes, bengalíes y paquistaníes.
Además, hay sesenta personas en huelga de hambre y se ha reportado que once personas se han cosido la boca, dijo hoy un portavoz de la ACNUR.
Por otra parte, el organismo ha ayudado a unas 150 personas que estaban en la frontera de Grecia con Macedonia a retornar a Atenas, tras haber recibido consejo de pedir el asilo en este país.
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