Fairfax (VA), 1 mar (EFEUSA).- El "voto preventivo" de los republicanos para frenar el liderazgo del magnate Donald Trump y el furor de los seguidores demócratas de Bernie Sanders, en un último aliento para alcanzar a la favorita Hillary Clinton, reflejaron la fiereza del supermartes, un día definitivo en las primarias.
El bando republicano pareció hacer bloque común hoy por primera vez en Virginia, uno de la docena de estados que votan en esta jornada de primarias, con un rechazo a Trump que se hizo patente a pie de urna y a favor del senador Marco Rubio.
«Voté por Marco Rubio porque es la última oportunidad de evitar que Trump tome el partido», dijo a Efe John Heimerman, de 63 años, que votó a primera hora antes de ir a trabajar al Instituto Cato, un centro de ideología libertaria.
Los colegios electorales abrieron a las 6 de la mañana hora local en Fairfax, el condado de Virginia donde más población está llamada a las urnas, con 700.000 votantes, así como en Alexandria, donde se espera más del 40 % de participación, según la Junta Electoral.
Entre los latinos, algunos votantes como Ron Vasallo, original de Puerto Rico, solo votarían a Rubio entre los republicanos y, «si Trump gana la nominación», afirmó que considerará votar a Hillary o al exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg, si este último al final se presenta.
Más tajante fue Paul, en último curso de instituto, que aprendió en clase cómo ejercer el derecho a voto y que hoy escogió a Rubio, pero que asegura que «se mudará a Canadá» si Trump gana la nominación.
Trump parte como favorito para este supermartes por el lado republicano y Clinton en la contienda demócrata, según los sondeos.
Los republicanos más despistados también podían votar hoy por Jeb Bush, ya que las papeletas disponibles en Virginia se imprimieron antes de que el exgobernador se retirara de la contienda, hace dos semanas.
Cada estado pone sus normas y en Virginia las elecciones son «abiertas», lo que significa que hay un único registro donde el votante se apunta y es en el mismo colegio electoral cuando han de decidir si votar en las primarias republicanas o demócratas.
«Se puede votar tanto en republicanos o demócratas, no importa en qué partido estés afiliado», explicó a los periodistas el vicepresidente de la Junta Electoral del condado de Alexandria, Jack Powers.
«Un activista demócrata puede entrar y pedir votar en las elecciones republicanas», añadió.
Sin embargo, Powers cree en «la responsabilidad del votante» de ser coherente con sus ideas y no boicotear al partido contrario.
Las normas para identificar al votante en Virginia son de las más estrictas del país: el carné ha de contener una fotografía, lo que descarta las facturas de la luz, gas o agua, otrora admitidas como prueba de identidad.
La población de la clase social más baja, sin vehículo a motor, desempleada y sin estudios universitarios, a menudo no dispone de carné alguno, en un país sin documento nacional de identidad.
Pero la batalla más fiera que se libra hoy en Alexandria es en el terreno demócrata, ya que de los más de 8.500 votantes registrados, el 70 % son de ese partido, según la Junta Electoral, en un condado predilecto para la jubilación y donde también viven muchos jóvenes altamente cualificados que trabajan en Washington.
Con solo dos candidatos demócratas -Bernie Sanders y Hillary Clinton- los voluntarios interceptan a los votantes madrugadores con trípticos y con chapas y pegatinas de regalo.
«Trato de influir a la gente en el momento en que entra al colegio electoral. Muchos aún no ha tomado una decisión entre Bernie o Hillary. Espero atraparlos y darles ese último empujón», explicó Justina Butera, voluntaria por Clinton, que basa sus argumentos en la «experiencia» de la exsecretaria de Estado.
El auge de Clinton es «decepcionante» para una pareja de jubilados seguidores de Sanders, que afirmaron a Efe que consideran al senador independiente el único «creíble, honesto y ético», y «capaz de hacer el cambio necesario».
A pesar de tener las estadísticas en su contra, hoy Sanders contó con numerosos apoyos en Virginia, de ex votantes del ahora presidente Barack Obama que incluso ni siquiera dan por seguro que voten por Clinton si gana la nominación del partido.
Deja un comentario
Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos estan marcados con *