México, 5 dic (EFE).- El cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu consideró hoy que el cine todavía no ha empezado su mejor etapa, ante las voces que señalan su próximo final, y lamentó el tipo de producción que se realiza actualmente, que comparó con la elaboración de hamburguesas.
El realizador comentó que en los últimos años ha perdido un poco el entusiasmo por hacer cine porque es «como un mago que conoce los trucos que hay detrás».
«Mi entusiasmo es el que ha estado falleciendo un poco; no ha muerto, pero sí ha estado a la baja sobre todo por el tipo de producción que se hace ahora», dijo González Iñárritu en una rueda de prensa en la que habló de su participación en el programa internacional que Rolex tiene entre mentores y discípulos en distintas áreas del arte.
Cuestionado por esa falta de entusiasmo y en referencia a un punto de vista emitido por el experimentado director británico Peter Greenaway, quien ha dicho que «el cine ha muerto», el mexicano aseguró que el cine es un arte «muy joven», algo más de cien años de vida.
«El cine todavía no ha empezado, creo que si la humanidad subsiste al calentamiento global y si hay cine en 50 años, creo que ofrecerá la posibilidad de muchas otras formas de experiencia», añadió.
El ganador de tres premio Óscar explicó que el cine de autor y el cine como expresión personal tiene todavía «mucho que explorar» y señaló que actualmente «se hace un gran cine en muchas partes del mundo, un cine muy interesante pero que tiene poca salida» para ser visto por la gran mayoría de las personas o por las masas.
«Las masas están en una dieta de hamburguesas, mientras hay grandes ‘chefs’ haciendo grandes y hermosos platos, pero estas masas no tienen la oportunidad de paladear estas experiencias exquisitas», apuntó.
«Es como si el 89 % de los restaurantes hicieran hamburguesas, esa es la realidad que estamos viviendo, entonces la dieta de las masas está siendo realmente afectada pero eso no quiere decir que el cine ha muerto», expresó.
Señaló que al actual mercado «sólo le interesan las franquicias y el tipo de productos» que actualmente se elaboran y «para los cineastas que toman al cine como un medio de expresión personal es una época distinta y difícil».
En el programa de mentorías 2014-2015, González Iñárritu, de 52 años, trabajó con el israelí Tom Shoval, de 34 años y al que invitó a acompañarlo durante el tiempo en el que trabajó en su nuevo filme, «The Revenant».
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