La automotriz Coreana regresa al Super Bowl por noveno año consecutivo, marcando la lealtad del fabricante Coreano al evento deportivo más importante de Estados Unidos y a su publico. Kia ha utilizado con frecuencia celebridades en sus anuncios de Super Bowl. La marca tuvo un divertido anuncio en el juego de la temporada pasada, protagonizado por
La automotriz Coreana regresa al Super Bowl por noveno año consecutivo, marcando la lealtad del fabricante Coreano al evento deportivo más importante de Estados Unidos y a su publico.
Kia ha utilizado con frecuencia celebridades en sus anuncios de Super Bowl. La marca tuvo un divertido anuncio en el juego de la temporada pasada, protagonizado por Melissa McCarthy que puso las credenciales medioambientales del Kia Niro, mientras intentaba salvar una ballena, un árbol y un rinoceronte.
Ese spot comercial que se llamaba “Hero’s Journey”, ganó el Super Bowl Ad Meter de USA Today. Kia eligió a Christopher Walken en 2016 y Pierce Brosnan en 2015.
El anuncio del Super Bowl del 2018 será supervisado por Saad Chehab, el ex marketin de Fiat Chrysler que estuvo detrás del icónico anuncio del Super Bowl “Born of Fire” para Chrysler en 2011 que protagonizó el rapero Eminem.
Chehab, que abandonó FCA en 2015, se unió a Kia Motors America como vicepresidente de marketing y comunicaciones en mayo.
Kia es la primera marca automotriz en confirmar su compra de anuncios para el Super Bowl del 4 de febrero, pero seguramente vendrán otros.
Los otros fabricantes de automóviles que estuvieron anunciándose en el super bowl del 2017, fueron Fiat Chrysler, Audi, Buick y Lexus.
La automotriz coreana que esta fortaleciendo su presencia en todo el ámbito del país, ha estado por delante de Hyundai en la preferencias del mercado Hispano, y está en los primeros puestos de fiabilidad entre los más importantes analistas del mercado.
El Super Bowl 52, también conocido como Super Bowl LII, está programado para el domingo 4 de febrero, y se jugará en Minneapolis en el estadio U.S. Bank, que acaba de terminar como anfitrión de su segunda temporada de Minnesota Vikings después de haber sido construido a tiempo para la temporada 2016 de la NFL.
El comisionado de la NFL, Roger Goodell, anunció en mayo de 2014 que Minnesota y su nuevo estadio serían sede del Super Bowl en 2018.
El estadio tiene capacidad para 66.200, pero se puede ampliar para albergar hasta 70.000 personas.
El juego será el primer Super Bowl en Minnesota desde el Super Bowl XXVI, cuando los Washington Redskins derrotaron a los Buffalo Bills, 37-24, el 26 de enero de 1992 en The Metrodome.
Deja un comentario
Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos estan marcados con *