Guardacostas advierten del peligro y la ilegalidad de apuntarles con láser

«Apuntar a un avión con un láser es un crimen federal y un delito grave según el título 18 de la sección 39A del Código de Estados Unidos. Si son hallados culpables, los acusados pueden ser multados con hasta 250.000 dólares y sentenciados a cinco años de cárcel», recordaron.

Según denunciaron las autoridades, en las últimas tres semanas se han registrado tres incidentes con rayos láser dirigidos a equipos de guardacostas que no han causado heridos pero están siendo investigados por el Servicio de Investigación de la Guardia Costera.

El 10 de mayo, una patrulla de guardacostas reportó haber sido objetivo de un «ataque láser» mientras realizaba una inspección de seguridad en una embarcación recreativa en los alrededores del Venetian Causeway en Miami, Florida.

Los otros incidentes estuvieron separados apenas por unas horas y ocurrieron el martes, cuando un láser verde impactó un barco de los guardacostas que patrullaba cerca de Sanibel Island (Florida) y otro fue dirigido a un helicóptero desde un lugar en tierra al sur de Punta Salina (Puerto Rico).

Los ataques con láser que reciben los pilotos tienen efectos temporales en su capacidad de visión y se traducen en imágenes persistentes, ceguera súbita, pérdida temporal de visión nocturna e incluso, en algunos casos, daños permanentes en la vista.

Si un efectivo es víctima de un rayo láser, se le impide «responder con efectividad y operar con seguridad el aeroplano, poniendo en peligro la seguridad y las vidas del equipo a bordo y del público en general», explicaron las autoridades en un comunicado, desde el que llamaron a cualquier testigo a colaborar.