Jerusalén, 3 jun (EFE).- El presidente de EEUU, Barack Obama, ha advertido de que las declaraciones del primer ministro Benjamín Netanyahu en contra de un estado palestino harán más difícil que su país pueda continuar su defensa cerrada de Israel ante iniciativas europeas en la ONU.
«Hasta ahora hemos rechazado todos los esfuerzos europeos y de otros porque decimos que el único modo de resolver esto es que las dos partes trabajen juntas. Y bien, aquí está el reto. De hecho, no hay perspectivas de un proceso de paz», dijo Obama en una entrevista anoche con un canal israelí que recoge hoy el diario Haaretz.
«Si nadie cree que hay un proceso de paz, entonces se hace más difícil discutir con los que están preocupados por la construcción en los asentamientos y con la situación actual. Es más difícil para mi decirles: ‘Ten paciencia, porque tenemos aquí un proceso, porque lo único que tienen que hacer es señalar a las declaraciones que se han hecho para decir que aquí no hay ningún proceso», añadió.
En los últimos años, el veto garantizado de EEUU ha impedido sacar adelante en el Consejo de Seguridad de la ONU diversas resoluciones de condena de la ocupación y que exigían un final al conflicto entre israelíes y palestinos.
Netanyahu aseguró durante la campaña electoral que, mientras él esté al frente del gobierno no habrá un estado palestino, si bien posteriormente se retractó de esa afirmación y mostró su disposición a iniciar un nuevo proceso de diálogo con los palestinos.
La postura de Netanyahu «tiene tantas advertencias, tantas condiciones que no es realista pensar que esas condiciones se vayan a cumplir en un futuro cercano», reprochó Obama, que añadió que todo el país «pierde credibilidad» en lo referente al proceso de paz con declaraciones como esa.
«La comunidad internacional ya no cree que Israel sea serio sobre la solución de dos estados. La declaración del primer ministro agravó» esa situación.
Obama también mostró su preocupación por «políticas israelíes motivadas solo por el miedo» que pueden llevar a «perder los valores centrales que eran la esencia de esta nación» cuando él era joven y «admiraba a Israel desde lejos».
El presidente estadounidense también señaló que comprende los miedos de Israel ante el deterioro de la situación en Oriente Medio, pero señaló que también debe estar preocupado por el equilibrio demográfico en la zona y en la presión que puede crecer en Cisjordania y Gaza si no se percibe que hay una solución al conflicto.
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