Naciones Unidas, 21 sep (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, conversó hoy telefónicamente con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, sobre la tensión que se vive en Cisjordania y e hizo votos para que se mantenga en "status quo".
Israelíes y palestinos atraviesan nuevas tensiones por una ola de violencia en Jerusalén Este y las limitaciones de acceso a la Explanada de las Mezquitas, en medio de temores sobre el riesgo de que estalle una guerra religiosa.
Según informó Naciones Unidas, Ban conversó con Abás sobre estas «tensiones recientes en Cisjordania, incluyendo Jerusalén Este», y reiteró «gran preocupación» por los incidentes registrados en la zona.
El secretario general de la ONU pidió a ambas partes a que se reduzcan las tensiones y se evite una escalada, a la vez que lamentó «recientes casos de retórica inflamatoria» que sólo servirá para «aumentar la desconfianza» y empeorar la situación.
«El secretario general subrayó la necesidad de se mantenga el status quo en los Santos Lugares», añade el comunicado sobre la conversación telefónica entre Ban y Abás.
En los últimos días se ha registrado graves incidentes entre palestinos e israelíes en ese lugar religioso y en otros puntos de Jerusalén y Cisjordania.
Esta semana celebran los judíos, por una parte, la jornada de Yom Kipur, la más solemne del calendario hebreo, y, por otra parte, la festividad musulmana de Eid el Adha o Fiesta del Sacrificio, una de las más importantes para los musulmanes.
En la explanada mencionada se encuentra la mezquita de Al Aqsa, la tercera de la jerarquía islámica, y en sus inmediaciones está el Muro de las Lamentaciones, lugar sagrado para los judíos.
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