Gobierno neoyorquino promete batallar en favor de recuperación de Puerto Rico

«Somos uno y vamos a unir fuerzas para batallar contra todo. Nueva York pasó por lo mismo en una ocasión y logró sobrevivir. La batalla que dimos fue que todo fuera justo y así lo haremos aquí también», aseguró Cuomo durante su visita a Puerto Rico, donde vive la mayor concentración de puertorriqueños fuera de la isla.

Cuomo viajó el lunes acompañado de una delegación de líderes políticos, económicos y sanitarios del estado de Nueva York, para ofrecer su ayuda a la isla de cara a esta crisis.

Durante un foro sobre el tema que tuvo lugar este martes en el anfiteatro de la Escuela de Farmacia del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) en San Juan, mostró su compromiso con la isla y ofreció la experiencia acumulada en el territorio neoyorquino.

En el foro también participó el gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, así como funcionarios de Nueva York, de la isla y del Congreso federal.

Uno de los aspectos que más preocupa en el ámbito sanitario es la desigualdad en los fondos públicos que recibe la isla con respecto a otros estados del territorio continental, por lo que el Gobierno de la isla ha emprendido una campaña para recabar apoyos y reclamar a Washington un trato más equitativo.

Particularmente preocupa el reciente anuncio de que los fondos federales que recibe la isla para financiar la sanidad pública sufrirán un recorte del 11 % que el Gobierno local recibe de EE.UU. a través del Medicare Advantage.

Este programa federal -del que se beneficia un 16 % de la población local- da cobertura sanitaria a ancianos, discapacitados y enfermos graves a través de planes privados de salud.

En conjunto, en Puerto Rico el 60 % de la población tiene cobertura sanitaria a través de programas públicos federales, pese a que los médicos reciben reembolsos muy inferiores a los que obtienen sus colegas en EE.UU., lo que a su vez está llevando a una enorme emigración de doctores (unos 400 al año).

El recorte causará una migración de los pacientes a Mi Salud, el programa local de cobertura sanitaria, lo que puede suponer un sobrecosto de entre 400 y 800 millones de dólares para un sistema que ya tiene serios problemas de liquidez, y en una isla que está sumida en una recesión desde hace una década.

Las autoridades locales se quejan de que Puerto Rico recibe la mitad de las tasas de los fondos para el sistema de salud en comparación con los demás estados. Sin embargo, sus ciudadanos pagan los mismos impuestos de seguro social y Medicare que los residentes de EE.UU.

«Puerto Rico ha sido tratado injustamente. Vamos a tratar de remediar esta situación porque la relación entre Nueva York y Puerto Rico es única en muchos niveles», resaltó Cuomo, quien describió a la delegación que le acompañaba como «el equipo de ensueño de Nueva York».

Cuomo y su delegación llegaron a Puerto Rico el lunes, cuando el gobernador neoyorquino se reunió con García Padilla en La Fortaleza (sede del Ejecutivo y residencia del gobernador), donde incluso se alojó, según comentó él mismo durante el foro.

Recordó que «los puertorriqueños fueron la primera gran comunidad en Nueva York con ala que me crié aparte de los irlandeses e italianos».

Igualmente, García Padilla incidió en que ambos estados «son una familia y seguirán siendo una familia» y apuntó que «lo único que estamos pidiendo es que todo este proceso sea justo. No estamos pidiendo ayuda en salud, sino que nos deben dinero de lo que nosotros, los puertorriqueños, pagamos».

Fuera del ámbito sanitario, el presidente de la Asamblea estatal de Nueva York, Carl Heastie, y el puertorriqueño Marcos Crespo, miembro de la asamblea del estado, propusieron impulsar el turismo de Puerto Rico al igual que lo hizo en su día la ciudad de los rascacielos.

Crespo apuntó al respecto que Nueva York invirtió 130 millones de dólares en turismo en los pasados cuatro años y medio y sus ganancias han sobrepasado los 8.500 millones.

Ambos territorios, dijo, «son de las regiones más bonitas del mundo», por lo que «podemos ser grandes colaboradores y más ahora, con los cambios que se están produciendo en el Caribe» señaló en referencia a la normalización de las relaciones entre Cuba y EE.UU.

Cuomo anunció de hecho que propondrá al Legislativo local que designe cinco millones de dólares a la campaña turística «Yo amo a Nueva York» para promover el tráfico de visitantes con Puerto Rico «y así crear empleos e impulsar la economía» de la isla.