Denver (CO), 3 dic (EFEUSA).- Varias docenas de desamparados que desde hace meses viven en carpas levantadas en un terreno en el centro de Denver, Colorado, iniciaron hoy gestiones para crear su propia "aldea de microcasas", tras ser informados de que deberán abandonar el espacio en el que ahora pernoctan.
«La Aldea Resurrección es una comunidad recientemente creada por desamparados y administrada por esas personas, quienes actualmente viven en tiendas de campaña mientras esperan que las autoridades municipales aprueben un lugar definitivo para las microcasas», expresó Marcus Hyde, portavoz de Denver Homeless Out Loud (DHOL).
«Nos han informado que tenemos dos semanas y media antes de que nos desalojen del lugar en el que estamos desde el 24 de octubre, porque la propiedad ha sido recientemente vendida a una empresa privada de construcción. Esas dos semanas y media son un período de gracia gestionado por el concejal Albus Brooks», explicó Hyde.
La bonanza económica que disfruta Denver, señalada por la revista Forbes como la primera entre las ciudades para negocios y seguir una carrera, estaría afectando a los desamparados de la ciudad, quienes ven que los terrenos en desuso que tenían a su disposición están pasando a manos privadas.
Según la Iniciativa de Metro Denver contra el Desamparo (MDHI), en la capital de Colorado y los seis condados que la rodean se detectaron este año casi 4.000 personas desamparadas.
La cifra anterior toma como base la definición de «desamparo» que utiliza el gobierno federal, pero si se incluyen a todas las personas sin un lugar fijo y propio de albergue el número llegaría a 6.130 personas.
MDHI estima además que casi el 40 % de todos los desamparados son hispanos.
«Necesitamos un terreno en el que se nos permita estar por lo menos durante cuatro meses. Es una situación temporal para protegernos del frío y de la nieve. Apelamos a la solidaridad y respaldo de todos lo que creen que aquellos que padecen de desamparo necesitan su propia comunidad, auto-administrada», dijo Hyde.
Para demostrar su buena voluntad, los miembros de la Aldea Resurrección realizaron esta mañana un «evento de limpieza comunitaria en los terrenos que ocupan y en el vecindario cercano.
Tras ello, marcharon hasta la municipalidad local para pedir la legalización de su comunidad y la derogación de las ordenanzas municipales que desde 2011 penalizan los denominados «campamentos ilegales» y a quienes se protejan de la intemperie «usando cualquier otra cosa que no sea la ropa propia».
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